09-11-12. Luego de
un complicado viaje (curvas y contracurvas en ascenso, ripio, llovizna, hombres
trabajando en la ruta, subidas atrás de camionetas cargadas) llegamos a la
laguna.
Se encuentra
rodeada de pastizales y juncos, por lo que es muy difícil acercarse mucho a su
orilla.
No sabemos cómo pero logramos encajarnos también aquí. No va a ser la última vez, ni la peor!!! |
El lugar,
construcciones en madera de hermosas casitas, hoteles y restaurants llenos de
flores, está diseñado para dar una brevísima caminata, comer y tomar una lancha
hacia la isla que se encuentra en la laguna; allí se puede recorrer un sendero.
En la puesta de
sol vemos muchísimos patos y gallaretas procurando su alimento, a pocos pasos
de donde estábamos, un bello y tranquilo atardecer.
Cuando nos
acomodamos para cenar, una señora nos golpea la puerta (no muy amablemente), y
nos dice que debemos salir de allí ya que la tierra es muy sensible y no tolera
el peso de los vehículos. Nos disculpamos, diciendo que habíamos preguntado a
los barqueros que allí se encontraban.
De ésa casa vinieron a echarnos. |
Era de noche, pedimos
refugio en el estacionamiento de un restaurant y pernoctamos allí. Algo del
relax obtenido en el lugar se había perdido.
Pero.. ahí donde a señora les dijo que se vayan por la inestabilidad del terreno fué donde se encajaron?
ResponderEliminarO sea, los echó pero a la vez les hizo un favor?
Y viéndolo así...o llegó tarde o evitó que desapareciésemos en el fango.Jaja
ResponderEliminarJajjaja
ResponderEliminar