26-04-12. Luego de la emoción, sí emoción, de sobrepasar los 900 msnm en Mendoza (lo cual asocié posteriormente a mi malestar en la cabeza, no “de”), hoy superamos los 1.200 msnm en La Rioja, transitando la mítica ruta 40.
Lamentablemente las nubes no nos permitían disfrutar más el paisaje. Cuando el sol atisbó un poquito, disfrutamos las magníficas Sierras Moradas, a nuestra derecha (el este).
También, las olvidadas vías de un tren, a la izquierda, nos acompañaron un buen rato. Daba lástima pensar en tanto trabajo, dinero, anhelos, abandonados, oxidándose en la tierra (cada vez más rojiza, cada vez más pedregosa).
En un momento aparecen puentecitos que, más adelante aún, se convierten en grandes estructuras de acero.
Entre San Juan y La Rioja, también hay árboles tiznados de tierra, parece que ésta se quiere trepar a los mismos y ver el cielo más de cerca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario