Sesenta y seis dìas por las ruas y rodovias:
+ Hay cartelería que anuncia que hay “Fiscalización Electrónica” de velocidad. En algunos lugares se ven las cámaras. También hay radares electrónicos móviles para detectar el exceso de velocidad en las rutas, incluso los domingos. En otros lugares hay “Lombadas Electrónicas” que miden la velocidad a la que uno conduce, y la muestra en un cartel luminoso, en general al ingreso de las ciudades.
+ Si la ruta atraviesa una ciudad, poblado, o cercanía de una escuela rural, hay docenas de lomos de burro en las proximidades.
+ En las rutas no hay lugar para detenerse, no hay banquinas o, si la hay, es muy angosta o está contra el morro, la selva, o un cordón de importante altura. Solamente a partir del Estado de Mato Grosso, hacia el noroeste, aparecen lugares para descender del automovil con cierta comodidad. No conocemos los Estados del Nordeste.
+ Constantemente hay carteles que delimitan la velocidad obligatoria, la mayoría de la gente, incluso los camiones, hacen caso omiso. A veces todos los que iban muy rápido empezaban a conducir muy despacio, creemos que es porque conocen la ubicación de las cámaras que miden la velocidad.
+ En la mayoría de las ciudades los peatones tienen prioridad de paso, que se respeta por parte de los automovilistas, eso sí cruzan por las esquinas. Los autos se detienen aún antes de que el peatón llegue a la esquina. En los Estados del Sur, vimos que el auto no arranca hasta que el peatón llegó a la vereda. A medida que se avanza al noroeste esta regla se vuelve màs laxa.
+ En algunas ciudades (San Pablo, Camboriú, Rio de Janeiro, Brasilia, etc.) hay carriles exclusivos para ciclistas, en otras se están construyendo.
+ Por las características geográficas, en algunos lugares, de la ciudad y de la ruta, es muy difícil conducir el auto, será por eso la proliferación de los “auto escola” donde aprenden a manejar. En todas las ciudades vimos muchísimos de estos autos. Nos llamó tanto la atención que preguntamos, y nos informan que es obligatorio el curso para obtener el carnet de conductor.
Son llamativas las importantes maniobras que realizan los conductores en reversa, como si estuvieran manejando hacia adelante. Dicha habilidad es necesaria sobre todo en las ciudades cuyas características geográficas son de subidas y bajadas, con calles angostas.
+ Es infinita la cantidad de motos que hay en todo Brasil. Por si fueran pocas, ahora están de oferta las de 125 cc de muchísimas marcas. Verlas de a grupos en las avenidas, o ver quince juntas estacionadas, por ejemplo, y a la cuadra siguiente ver otras quince, nos sorprende. Hay estacionamientos exclusivos para motos en calles, supermercados, plazas, lugares públicos.
En las ciudades grandes conducen a importante velocidad, zigzagueando entre los autos; en San Pablo, se van anunciando a los bocinazos, así los autos no se salen de su carril y las atropellan. Estos bocinazos originan un ruido atronador.
Los conductores poseen un fuerte gremio que los protege, igualmente hay muchísimos accidentes diarios.
+ Hacer señas de luces significa que quine conduce le está dando paso al otro, tanto sea a un peatón como a otro vehículo.
+ En los "pedagio" (peajes) no aceptan moneda extranjera. Lo malo es que lo informan con carteles 500 metros antes de llegar al mismo.En el Estado de San Pablo hay muchìsimos peajes, algunos cuestan R$8. Otros bastante menos.
+ En la estaciones de servicio Ipiranga y Br, especialmente la primera, hay amplias playas de estacionamiento, bueno baños, algunos con duchas gratis, agua fría y caliente para beber. Muy amables los empleados.
Algunas de las que están sobre las rutas son inmensas, le decíamos “ciudades camión” por la cantidad de estos vehículos que había estacionados.
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